La inmobiliaria Mascasa está ubicada en el pueblo de Sevilla la Nueva, Comunidad de Madrid. Dicho pueblo cuenta con no lejos de 10.000 habitantes, por mitad viviendo en el propio pueblo, y la otra mitad en urbanizaciones periféricas. Es un pueblo con encanto propio, muy cuidado, que nos (66 y 68 años) gustó muchísimo. Tras jubilarnos y haber dejado Madrid capital, decidimos que asentarnos allí podría ofrecernos ideales condiciones de jubilación.
En Sevilla la Nueva, habíamos identificado a seis agencias inmobiliarias. En una, nos dijeron que el corredor iba a llamarnos al día siguiente, era en septiembre del 2019, en febrero del 2021, seguimos a la espera. Tres otras nos dijeron que no tenían nada de lo que buscábamos, algo muy específico: por no ser exactamente jóvenes, queríamos una casa a ser posible sin escaleras, o sea de planta única, y céntrica: el día que decide la Autoridad que somos demasiado viejos para conducir, no queríamos vivir en una urbanización a dos kilómetros del centro.
Y dos agencias “encontraron” la casa. He aquí la historia un tanto rara de la primera.
En octubre del 2019, descubrimos gracias a la ayuda de un amigo quien había notado su exsitencia, una casa que correspondía a todos nuestros deseos, céntrica y de planta única, pero okupada. Hasta habíamos identificado en el mismo mes de octubre a su propietario gracias a una “nota simple” (ver extracto).
Al pertenecer dicha casa a un fondo de inversión y poco acostumbrados a este mercado, hemos manifestado a la inmobiliaria Mascasa (en Sevilla la Nueva) con quien en este momento estábamos en contacto, nuestro deseo de comprarla acompañados por un agente inmobiliario, pagando la correspondiente comisión. Considerando que traíamos nosotros el objeto, sin que la agencia tuviera que encontrarlo, dicha comisión típicamente ronda el 4%, más IVA.
Luego, nos quedamos casi un año sin noticias de “Mascasa”.
En septiembre del 2020, nos llamó Sergio Ortiz, Socio-Director de Mascasa, para informarnos de que había encontrado la casa ideal para nosotros: ¡era la que le habíamos enseñado en octubre del año anterior!
Nos la dio a visitar, aseverando que se encargaría de vaciar la casa de sus okupas, y nos atendió luego en su oficina el día 29 de octubre, 2020, para presentarnos las condiciones.
Precio de la casa : 150.000
ITP, 6% : 9.000
Gastos ≈ 1% : 1.500
Comisión de agencia: 6.000
IVA 21% : 1.260
“Abogados” : 40.000
IVA 21% : 8.400
Total : 216.160
La casa puede parecer muy barata, pero necesitaba una reforma integral. Ahora, pareciéndonos que estábamos en derecho de conocer el desglose de tal faraónico presupuesto de honorarios de abogados, preguntamos que tenían que hacer estos “abogados” para este precio.
Contestación: “no sé, tienen que hacerlo”. Al constatar nuestra reticencia, añadió Sergio Ortiz: “mirad, puedo ver con ellos para hacer bajar un poco estos honorarios, entre 30.000 y 40.000”. Contestamos entonces que 30.000 sería un tope, y que manteníamos nuestra pregunta: ¿que intervención iban a efectuar estos letrados? Sin ni siquiera coger su teléfono para llamar a estos “abogados” e intentar bajar sus honorarios, nos dijo el agente que sí, estaba bien, con 30.000 podría ir.
También argumentó dicho interlocutor que tenía que pagar 5.000 euros a cada uno de los cuatro okupas para que se marchen. Mala suerte: da el caso de que dichos okupas eran Marroquíes, y que yo hablo unas palabras de árabe, no lo suficiente para mantener una conversación, pero ampliamente bastante para inspirar la confianza de un interlocutor. El “jefe” de estos ocupantes confirmó que iban a recibir 5.000 euros… en total (no cada uno) para marcharse.
Pedimos entonces a Sergio Ortiz que nos mandara los documentos a firmar por correo electrónico para que los examináramos, informándole de que pasaríamos el día siguiente para firmarlos.
Unas horas más tarde, recibimos dichos documentos (copias abajo). Los “abogados” a 30.000 se habían desvanecido, sustituidos por… ¡una agencia inmobiliaria de Móstoles, “Moinsa Inmuebles y Servicios S.L.”! O sea que por una casa que les había sido traída de la mano, pretendía la agencia Mascasa de Sevilla la Nueva percibir 46.000 (rebajados a 36.000) euros de comisión, 30,6% rebajados a 24%, más IVA. Y luego, ¿qué más ibamos a descubrir?
Al final, vendieron esta casa. Pero se rumorea en el pueblo que no al precio que querrían cobrarnos, sino constatando el fracaso de un intento que le hubiera permitido pagar de un golpe su coche de lujo, la vendieron con una comisión mucho más normal, quitándonos la oportunidad de pasar nuestra jubilación en una casa adecuada a las necesidades de una pareja ya no muy joven. Me habrán tomado por un Suizo, lo que soy, pero no más rico que el promedio de los Españoles. Había vivido muy feliz en Madrid durante más de 25 años, y era la primera vez que alguien intentaba sobrefacturarme de esta manera.
La maniobra no es ilegal, y si les gusta pagar más, la agencia inmobiliaria Mascasa en Sevilla la Nueva (Madrid) se puede recomendar.